Las pozas de Planes d'Hostoles y de Sant Feliu de Pallerols tienen un valor natural muy alto. El río Brugent actualmente cuenta con un buen estado de conservación y sus aguas tienen pocos contaminantes. Principalmente en primavera y en verano, este espacio se llena de vida y se convierte en un hábitat esencial para la fauna, ya sea para su reproducción, alimentación o refugio. También hay un bosque de ribera bien conservado que preserva sus características naturales. Además, estos puntos de agua atraen numerosos animales que van a beber, como por ejemplo muchos pájaros autóctonos y migratorios.
Las pozas del Brugent alojan una gran diversidad de plantas y animales, entre ellas algunas especies a las que debemos parar especial atención, ya que son de un gran interés o están en peligro de extinción.